Mi nombre es Almudena, soy madrileña de nacimiento y extremeña de adopción. 

Antes de yo llegar a casa, ya había una perra con mis padres, su nombre Arauca, era una Setter Inglesa, una santa. La perseguía por todos los lugares de la casa para estar junto a ella, cuando ya se sentía acorralada y aburrida de mí, se metía bajo una silla, miraba a mis padres con una cara de pena impresionante y lo máximo que hizo fue gruñirme.

Gracias a ella y al gran amor que mi padre me inculcó por todo «bicho viviente», me han convertido en una persona que no concibe su vida sin animales, ya sean perros, gatos, sobre todo, pero por casa han pasado un sin fin de criaturas que me han hecho inmensamente feliz.

En casa siempre ha habido perros pero la primera westie apareció por casualidad y me enamoró sin remedio. Con ella comenzó el rum rum en mi cabeza y mi sueño fue tomando forma.

Gracias a ella, a mi padre que desde allá donde se encuentre me está mandando fuerza e ilusión, y al apoyo y trabajo de mi madre, el sueño de hacer realidad la Cría del Westie en casa, se está haciendo realidad. 

Desde aquí quiero dar las gracias a todos y cada una de las personas que han pasado por  mi vida en estos últimos cinco años, a los que llegaron y se bajaron en alguna parada del tren, a los que subieron y aún siguen, por sus enseñanzas, por su apoyo y por su ayuda. Pero sobre todo a mi madre que está ahí codo con codo conmigo, ayudándome, alentandome y apoyándome. Sin su paciencia y apoyo este sueño no podría haberse convertido en realidad.

Por último muchas gracias a tod@s los que confiaron en nuestro trabajo y le hicieron un huequito en su familia a alguno de los cachorros que han nacido en casa y que con tanto amor y cariño hemos criado.

Almudena

 

 

Pin It on Pinterest